¿Qué es el ojo seco?
El ojo seco es una enfermedad ocular producida por la falta de lágrima, lo que provoca la aparición de síntomas oculares y la inflamación de la superficie anterior del ojo. Afecta a un porcentaje elevado de la población. Existen diferentes causas, factores de riesgo, y tipos, lo que determina diferentes grados de severidad por lo que el tratamiento deberá adecuarse de manera individualizada a cada paciente. Su importancia radica en el hecho de que supone uno de los motivos más frecuentes de consulta en Oftalmología, y en la alteración de la calidad de vida de la persona que la padece.
¿Padeces alguno de estos síntomas?
Aunque puede variar de un paciente a otro, según la severidad de la sequedad ocular, los síntomas que se pueden presentar serian:
- Sensación de roce o contacto como si se tuviera arenilla dentro del ojo.
- Ardor, con sensación de quemazón, picor, escozor.
- Dolor en los ojos, sobre todo si existe alteración corneal (queratitis, ulcera).
- Cansancio y pesadez de los ojos.
- Ojo rojo más o menos intenso.
- Mayor sensibilidad a la luz.
- Visión borrosa o fluctuante. La visión se vuelve menos nítida y con mayor dificultad para enfocar la imagen.
- Fatiga visual en actividades cotidianas tales como la lectura, conducción, uso del ordenador, móvil, ver la TV.
- Intolerancia al uso de las lentes de contacto
- En ocasiones puede provocar que se pongan los ojos llorosos, como mecanismo de protección, induciendo un aumento vía refleja del componente acuoso de la lágrima.
Ante la presencia de estos síntomas se deberá acudir a su oftalmólogo para su completa valoración, y poder determinar las causas y la situación clínica de su ojo.
¿Qué provoca el ojo seco?
Está producido por una disminución de la cantidad de la lágrima en el ojo, bien por una falta en su producción o por una mayor evaporación de la misma. Ambas situaciones pueden ser producidas por múltiples causas que pueden actuar de forma aislada o confluir varias de ellas.
¿Cómo diagnosticar el ojo seco?
Ante un paciente que acude a la consulta refiriendo sintomatología de ojo seco es importante llevar a cabo en primer lugar un test que mida la intensidad del ojo seco, existiendo diferentes cuestionarios de evaluación, como el Test de OSDI que nos permiten clasificarla en normal, leve, moderado y grave.
En el INSTITUTO OFTALMOLOGICO de GRANADA (IOG) disponemos del equipo KERATOGRAPH 5M para la realización de diferentes pruebas diagnosticas relacionadas con esta enfermedad.
Datos a valorar para el diagnóstico de ojo seco: cuestionario clínico.
Pruebas diagnosticas clínicas que irán encaminadas tanto a valorar la cantidad y calidad de la lágrima como los signos clínicos de un ojo seco.
- Valoración altura del menisco lagrimal.
- Evaluación del tiempo de ruptura de la lagrima:mide la estabilidad de la lágrima. Si se hace con un colorante se le denomina TBUT (tear break-up time) y si lo hace sin colorante, de forma no invasiva NITBUT.
- Cuantificación de la secreción lagrimal (Test de Schirmer).
- Valoración glándulas palpebrales: Meibografía.
- Valoración de la integridad del epitelio de la superficie anterior del ojo mediante el uso de colorantes.
- Valoración de la osmolaridad lagrimal.
También el INSTITUTO OFTALMOLOGICO de GRANADA (IOG) dispone del equipo TEAR LAB para la medición objetiva de la osmolaridad lagrimal.
En mujeres mayores de 60 años, se estima que el 80% padecen ojo seco
Tratamiento de ojo seco
El ojo seco es una enfermedad ocular que carece hoy de tratamiento curativo, siendo todas las medidas que se utilizan, paliativas, encaminadas a aliviar y mejorar los síntomas que provoca. Es importante que el oftalmólogo explique al paciente desde el principio en qué consiste la enfermedad de ojo seco con total claridad. Se trata de un tratamiento que se tiene que ajustar a cada paciente, por lo que es recomendable que sea siempre valorado por un oftalmólogo.
Tratamiento con luz pulsada intensa (IPL)

El tratamiento con luz pulzada permite actuar sobre la inflamación periocular existente, mejorando la funcionalidad de las glándulas palpebrales, consiguiendo recuperar las propiedades naturales de la lágrima y la hidratación ocular. Es un tratamiento que actúa fundamentalmente sobre la causa que lo provoca, y no solo sobre el síntoma, que es lo habitual en los tratamientos clásicos del ojo seco
El INSTITUTO OFTALMOLÓGICO de GRANADA (IOG) dispone del equipo médico y la experiencia acumulada por el ejercicio profesional de muchos años, junto con los medios necesarios para el correcto diagnostico, seguimiento y tratamiento de esta enfermedad, cuya importancia radica no solo en el hecho de su elevada prevalencia sino y sobre todo, en la alteración en la calidad de vida de la persona que la padece.